Abrazados tú y yo
Llegamos al río
Cuando la luz de la luna
Ponía suspiros del alma
En la cara del río.
En tus labios
Puse una flor
Y con un beso
Abrimos la puerta
De este amor
Tuyo y mío.
Sus raíces prendieron
En las alturas
Como en la tierra
Prende los olivares
Te amé con todo el alma
Y con todo el corazón mío
Por eso ni tormentas
Ni vendavales
Tiraron este amor
Que nació en el río.
Como hermosa luz
De esmeradas
Enamoradas
Y como el despertar
De la aurora
Es la luz
De este amor
Tuyo y mío.
Enamorados
Vivimos ahora
Nuestro amor
Encendido
Donde seré
Tu candela
En medio
Del frío.
El seguirá
Viviendo
Más allá
De la muerte
Y estará siempre
Presente
En la dorada
Luz de luna
Que se refleja
En el río.
Mérida 21 de Febrero de 2012
Autor: Víctor Muñoz Jiménez.
Bonita musicalidad le das a tus versos. Gracias por compartirlos.
ResponderEliminarGracias Salvadorpliego, eres muy generoso con mi humilde poema. Un abrazo. Victor.
EliminarMe ha gustado tu bello poema,es cristalino como el agua del río... gracias por compartirlo conmigo. Cariños.
ResponderEliminarGracias Karyn, me alegro mucho Karyn de que te haya gustado, efectivamente pensé en la transparencia del agua clara del río, la luz de luna y la grandeza del amor que Señor me regaló a través de mi esposa; quien me pidió que hiciera un poema en homenaje a nuestro amor. Y este es un poema autobiográfico. Toda la gloria sea para el Ser Supremo quien nos regala la inspiración y el amor verdaderos. Un fuerte abrazo para ti Karyn. Paz y Bien para ti y para todos los tuyos.
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